Corsair CX750F RGB, review y análisis completo en español

2022-11-03 16:46:31 By : Ms. Belan ForUDesigns

Hace unas semanas que Corsair presentó su primera familia de fuentes de alimentación con iluminación RGB, las Corsair CX-F RGB Series, orientada a usuarios entusiastas que buscan una fuente de alimentación de calidad que le de un toque de color adicional a su equipo gaming, pero sin tener que gastar demasiado dinero. En el día de hoy os mostramos nuestro análisis completo del modelo Corsair CX750F RGB, el tope de gama de esta familia que a pesar de su gran calidad y garantía tiene un precio bastante asequible, convirtiéndola en una opción ideal para la mayoría de los usuarios.

Estamos como podéis ver ante una fuente de alimentación con certificación de eficiencia 80 Plus Bronze, que si bien es el mínimo aceptable es un pequeño precio a pagar por poder contar con una fuente de 750W de calidad y con cableado totalmente modular por menos de 100 euros. Como ya hemos dicho, su cableado es totalmente modular, algo que facilita mucho la instalación y especialmente a la hora de esconder cables, ya que no tendremos cables innecesarios por medio. A este respecto, todo el cableado con la salvedad del ATX de 20+4 pines es plano, por lo que se facilita todavía más este hecho.

A destacar que a pesar de ser una familia de fuentes de alimentación de gama de entrada, sus 750W de potencia, su plenitud de conectores (incluye incluso dos EPS de 8 pines para las placas base de más alta gama) y la calidad habitual de Corsair con condensadores electrolíticos japoneses de 105ºC hacen que esta fuente de alimentación sea adecuada incluso para PC gaming de gama alta (siempre y cuando tengas en cuenta que da 750W como máximo).

Destaca por supuesto el hecho de que Corsair ha instalado un ventilador de 120 mm con iluminación RGB. No se trata de una fuente con control digital así como tampoco tiene control digital para su iluminación, sino que han instalado un botón exterior en la parte trasera que permite cambiar entre colores (presionándolo) y efectos (manteniéndolo presionado) de manera fácil y rápida.

Como es habitual en esta gama de productos, Corsair empaqueta la CX750F RGB en una caja de cartón duro de color amarillo y negro en cuya cara principal podemos ver una imagen de la fuente de alimentación acompañada de la marca, el modelo, y en una esquina la certificación 80 Plus de eficiencia.

En la parte posterior encontramos una descripción del producto en varios idiomas, una explicación del funcionamiento del ventilador (que no tiene función de parada) y la tabla de potencias. En uno de los laterales tenemos todas las certificaciones de cumplimiento del producto y un listado del cableado que se incluye.

Abrimos la caja en forma de cofre y podemos ver ya la fuente perfectamente protegida, acompañada del completo manual de instrucciones característico de las fuentes de este fabricante, el cable de alimentación con enchufe europeo y el cableado modular en una simple bolsa de plástico.

Veamos todos los accesorios que se incluyen. Aquí está el cable de corriente con conector schuko, así como un blíster de plástico con cuatro tornillos y algunas bridas.

También el completo manual de instrucciones con muchísima información técnica sobre la fuente, y otro panfleto con información sobre la garantía.

Una cosa mala de las fuentes «baratas» es que el fabricante no cuida tanto el embalaje y la presentación, y prueba de ello es que el cableado modular viene empaquetado en una simple bolsa de plástico transparente que, de hecho, deberemos romper para poder sacar los cables.

En la siguiente galería podéis ver todo el cableado incluido, y como adelantábamos en la sección anterior todos los cables son planos con la salvedad del ATX de 20+4 pines, que es grueso.

Además de los cables de conexión eléctrica, esta fuente cuenta también con otro cable por si queremos conectarla al cabezal RGB de la placa base en el caso de tenerla para así poder configurar la iluminación desde el software de ésta.

Vistos los accesorios, es la hora de pasar a ver la fuente de alimentación en sí misma y aquí la tenéis, con unas dimensiones mínimas para el estándar ATX que nos facilitará mucho su instalación en cualquier tipo de caja.

En los laterales tan solo encontramos las etiquetas identificativas con la marca y el modelo, mientras que en la zona superior tenemos una gran etiqueta con las certificaciones y la tabla de potencia.

En la zona inferior tenemos, tras una rejilla, el ventilador RGB de 120 mm que es el encargado de refrigerar los componentes internos. Como indicábamos al principio este ventilador no tiene función de parada, siempre está en funcionamiento, pero Corsair dice que es ultra silencioso y que ni siquiera notaremos que está en funcionamiento.

Finalmente, nos queda ver el panel interior de conexiones y el exterior, donde además del conector de alimentación y el interruptor de encendido y apagado encontramos el botón RGB, que como explicamos antes manteniéndolo pulsado cambiaremos entre los efectos disponibles y con pulsaciones cortas cambiaremos su color.

Vista por fuera, es hora de abrir esta Corsair CX750F RGB para ver qué esconde bajo el capó. Para ello, lamentablemente tendremos que levantar las pegatinas laterales para acceder a cuatro tornillos en total que nos permitirán levantar toda la parte superior de la carcasa metálica, separando el ventilador del resto de componentes.

El ventilador es un Corsair NR120L de 120 mm, con 7 aspas muy anchas que garantizan una gran presión estática para que el aire empujado penetre y refrigere todos los componentes internos. Obviamente las aspas son translúcidas para fomentar una mejor iluminación.

Este es el interior de la Corsair CX750F RGB, y nos llama poderosamente la atención dos cosas: la primera es la gran cantidad de disipadores (cuatro en total) que Corsair ha dispuesto en el interior, denotando que la falta de eficiencia de esta fuente generará bastante calor. La segunda es el uso de un único condensador japonés de 105ºC cuando lo habitual es utilizar una pareja, además de su ubicación casi en el centro en lugar de en un lateral. Creemos que Corsair ha hecho esto así deliberadamente para acercar el condensador principal al filtro de entrada, ya que es solo uno, de manera que le llegue la corriente con menos interferencias.

También es un poco inusual la manera en la que Corsair ha dispuesto el filtro de entrada. Normalmente aquí encontramos condensadores Y y X para hacer las veces de filtro, pero en este caso en lugar de eso Corsair ha sobredimensionado el PCB del interruptor de corriente para instalar éstos ahí en lugar de en el propio cable, añadiendo también la toma de tierra (el cable verde y amarillo). Esto es bueno, realmente, ya que al estar el circuito soldado a un PCB se reduce el ruido eléctrico en comparación con hacer una soldadura de un condensador directamente en el cable.

Aquí está, en color azul bastante llamativo en lugar del marrón habitual, el condensador electrolítico japonés de 105ºC, y esto es así porque en este caso el condensador principal es un Nippon Chemi-Con KZE. En el interior encontramos hasta 12 condensadores más firmados por Teapo, también de 105ºC, así como 18 condensadores X e Y más pequeños firmados también por Teapo pero en lugar de ser electrolíticos son de polímeros.

Aquí tenemos una sisterboard que sirve tanto para controlar el funcionamiento del ventilador como su iluminación, ya que los dos conectores que tiene son precisamente uno para el ventilador y otro para el botón RGB de la parte trasera de la fuente.

Entre el resto de componentes, destacan el Thrmistor SCK-2R58 de 2.5 ohmios, dos MOSFETs Infineon IPA60R120P7 para el PCF activo complementado por un diodo Infineon IDH06G65C6 y su conversor principal firmado por Alpha & Omega con su modelo AOTF22N50.

Finalmente, hay que destacar que como siempre el trabajo de soldadura en las fuentes de Corsair es espléndido, una garantía de que evitaremos potenciales problemas.

En general, a pesar de que esta Corsair CX750F RGB de Corsair no deja de ser una fuente de alimentación de gama de entrada con certificación 80 Plus Bronze, los componentes internos utilizados por el fabricante son de una excelente calidad, así como excelentes son las soldaduras. La única pega que le podemos sacar a esta fuente es que dada su baja eficiencia, Corsair se ha visto obligada a instalar más disipadores de la cuenta, pero tampoco es que sea una desventaja, simplemente había un problema y lo han solucionado, ni más ni menos.

Vista la fuente por dentro y por fuera es el momento de conectarla a nuestro banco de pruebas para ver su comportamiento. En este caso el hardware utilizado consta de:

Resulta complicado el poner a prueba una fuente de alimentación solo con un PC, sin un generador de carga (antiguamente tuvimos uno, pero tras averiarse no pudimos repararlo), así que vamos a apoyarnos en el informe de la certificación 80 Plus para mostraros algunos datos interesantes de esta fuente de alimentación (además por supuesto de nuestras propias pruebas, obviamente).

Estos datos nos muestran la eficiencia de esta fuente de alimentación, que a pesar de portar el logo de 80 Plus Bronze cuando tiene un 50% de carga (que es la situación más típica jugando) su eficiencia está por encima del 88%, un valor que no está nada mal. De todos modos, en la gráfica de entrega de potencia podéis ver que hay bastante energía que se desperdicia en forma de calor.

Vamos ahora sí con las pruebas propias. Para poner el equipo a máxima carga, hemos utilizado OCCT en su última versión con una carga de 10 minutos al máximo (CPU + GPU), y vamos a realizar dos pruebas: una en frío (PC recién encendido) y en caliente (calentando a propósito la fuente con un secador a 50ºC), en ambos casos dejando un minuto de reposo al final para ver cómo varían los voltajes.

La siguiente prueba ha sido realizada con la fuente «en frío», es decir, con el PC recién arrancado, antes de que los componentes puedan entrar en calor. El resultado obtenido ha sido el siguiente:

El resultado es excelente, con el raíl de +12V extremadamente estable, aunque un poco por encima de los 12V. El raíl de +5V sí que sufre una leve variación pero nada preocupante.

Para esta prueba calentamos artificialmente la fuente con un secador de pelo para ponerla a 50ºC. ¿Por qué hacemos esto? Porque como sabéis los componentes funcionan peor cuanto más calientes están y las fuentes de alimentación no son una excepción. No es infrecuente esta temperatura de 50ºC en un PC, así que queremos poner a prueba a la fuente en las peores condiciones posibles (pero realistas). Este es el resultado obtenido.

El resultado en la prueba en caliente es cuando menos curioso; antes variaba el raíl de +5V y el de +12V estuvo sólido como una roca y ahora es al contrario, el de +5V ni se inmuta durante toda la prueba pero el de +12V sí que sufre algunas variaciones, muy leves, pero de nuevo nada preocupante porque, de hecho, es muy estable.

El resultado es que la fuente se ha comportado de manera excelente, entregando unos valores muy cercanos a los ideales y además muy estables incluso poniendo el equipo al máximo y con el añadido de la prueba en caliente que le hacemos. Sin duda los componentes de primera calidad que Corsair ha montado en esta fuente de alimentación dan un resultado excelente.

Esta fuente de alimentación Corsair CX750F RGB es la punta de lanza de la primera familia de fuentes de alimentación del fabricante en contar con iluminación RGB, algo que lleva mucho tiempo integrando en casi todos sus dispositivos y del que ya ha alcanzado cierto nivel de maestría, por lo que la consecución en esta fuente de alimentación es poco menos que excelente en cuanto a su impacto visual, si bien como se trata de una familia de fuentes de alimentación de gama de entrada, se han quedado un poco cortos ya que lo ideal habría sido el poder controlarla con iCUE.

Con todo, estamos ante una fuente de alimentación totalmente modular, con una muy buena estabilidad y potencia suficiente si bien no para un PC tope de gama, sí para un PC gaming de gama alta sin el menor inconveniente. A esto hay que añadir la garantía de 5 años con la que Corsair dota a toda esta familia de fuentes, aunado al hecho de la calidad de siempre que nos da la seguridad de que estaremos comprando un buen producto.

En definitiva, Corsair ha logrado el objetivo de ofrecer una fuente de alimentación de buena calidad y con diseño gaming que forma parte de la gama de entrada, con un precio que si bien es cierto que se sale un poco de esta gama «barata», sigue siendo bastante razonable teniendo en cuenta lo que ofrecen.

Por todo ello, desde HardZone consideramos que esta Corsair CX750F RGB es merecedora de nuestro galardón de Oro y nuestra recomendación por su diseño.