Probamos la Corsair HX1000i, ¿deberías cambiar tu fuente de alimentación por esta?

2022-11-03 16:09:11 By : Mr. chen li

Hace tan solo unas semanas que CORSAIR anunció la actualización de su familia de fuentes de alimentación HX, ahora llamadas HXi porque han renovado su funcionamiento y ahora es completamente digital. En este artículo te vamos a mostrar de primera mano cómo son y cómo funcionan estas fuentes de alimentación a la hora de la verdad, y más concretamente del modelo HX1000i de 1000 vatios de potencia y certificación de eficiencia 80 Plus Platinum.

Que una fuente de alimentación sea completamente digital no quiere decir solo que podamos monitorizar e incluso controlar sus parámetros mediante software, sino que al contar con un control digital permite tener una eficacia a la hora de generar y convertir voltajes mucho más fina, lo que al final se traduce en una mejor eficiencia energética que hace que consuma menos electricidad y que se caliente menos.

Como podemos ver, estamos ante una fuente de alimentación con cableado completamente modular, lo que significa que solo tendremos que conectar los cables que vayamos a utilizar, pudiendo guardar el resto para que no estén molestando en el interior del PC. Los cables son de color negro y planos, a excepción del ATX de 24 pines que es grueso. A destacar que incorpora dos conectores EPS de 4+4 pines para dar servicio a los sistemas más modernos existentes.

Este modelo incorpora un ventilador de 140 mm de funcionamiento híbrido, lo que significa que solo entrará en funcionamiento cuando la fuente llegue a cierto nivel de carga (como se puede ver en la gráfica, a partir de 500W de potencia), y hasta entonces estará apagado para proporcionar el máximo silencio. Sin embargo, esto es algo que podremos configurar por nosotros mismos si queremos mediante el software, CORSAIR iCUE.

La CORSAIR HX1000i es compatible con el modo modern standby, tiene condensadores electrolíticos japoneses de 105ºC y porta certificación de eficiencia 80 Plus Platinum, por lo que ya entenderéis que estamos sin lugar a dudas ante un modelo de fuente de alimentación de alta gama. CORSAIR dota a esta familia de fuentes de 10 años de garantía, por lo que están más que seguros de que el producto es bueno de verdad y que durará mucho tiempo, si bien es cierto que su precio va acorde a la garantía y a la gama: 238,90€.

Finalmente, nos queda volver a mencionar que esta familia de fuentes es completamente digital, lo que significa que la topología LCC y la conversión DC-DC proporciona una energía constante y limpia, evitando ruidos y maximizando la eficiencia.

Como es costumbre en las fuentes de alimentación de este fabricante, la HX1000i viene embalada en una caja de cartón duro de colores negro y amarillo en cuya cara frontal podemos ver una imagen a tres cuartos del producto acompañada del nombre y de su certificación de eficiencia, dejando para la parte posterior más información como su tabla de potencia, su curva de ventilador o su curva de eficiencia.

Al abrir la caja, en forma de cofre, podemos acceder directamente a la fuente de alimentación, que viene perfectamente protegida, y a una caja de cartón en la que encontraremos los cables modulares y los accesorios.

Vamos a comenzar como siempre con los accesorios lo primero de todo. CORSAIR incluye un cable de alimentación europeo y una bolsita con unas bridas y los tornillos necesarios para anclar la fuente a una caja, así como un pequeño folleto con información sobre seguridad. Se echa de menos el completo manual que antaño CORSAIR incluía en sus fuentes, y que además de las instrucciones de uso incorporaba información muy técnica sobre el dispositivo.

En cuanto al cableado, esta fuente cuenta con un cable con conector ATX de 24 pines, dos cables con conector EPS de 4+4 pines, cuatro PCIe cada uno con dos conectores de 8 pines, tres cables cada uno con 4 conectores SATA y un cable más con tres conectores MOLEX y un Floppy. Además, se incluye un cable USB-C para conectar la fuente al cabezal interno USB 2.0 de la placa base y así poder manejar mediante software todos los parámetros.

La CORSAIR HX1000i resulta bastante pesada para lo que es habitual, es una fuente que exteriormente es bastante robusta y maciza. Estéticamente no varía demasiado en comparación con otras fuentes de este fabricante, con su exterior en color negro, conectores modulares y demás.

Ambos laterales están adornados con la habitual pegatina que nos indica la marca y el modelo, mientras que en la zona superior tenemos la habitual pegatina con la tabla de potencia y certificaciones de cumplimiento.

En la parte trasera tenemos una rejilla de ventilación junto con el botón mecánico de encendido y apagado y el conector para el cable de alimentación. Hay una pegatina que podemos quitar que nos informa de que no debemos asustarnos si el ventilador no funciona al enchufar la fuente, porque es híbrido y es lo normal.

En la parte frontal, como no podía ser de otra manera, tenemos los conectores modulares. A destacar que como ya es casi siempre habitual, el conector del cable ATX está partido en dos conectores, y a destacar también el conector USB-C del cable de control, y el LED indicador de estado que más adelante veremos.

Finalmente, en la parte inferior tenemos una rejilla tras la que se esconde el ventilador de 140 mm responsable de hacer que entre aire fresco al interior de la fuente y que así se mantenga a buena temperatura de funcionamiento.

Para acceder al interior de la fuente de alimentación tan solo necesitamos extraer los cuatro tornillos exteriores que están en la cara donde está ubicado el ventilador, y luego tirar de la pieza hacia arriba. Esto ya nos da acceso directo para ver todos los componentes, algo que se hace más sencillo si desconectamos el conector del ventilador para poder separar ambas piezas adecuadamente.

El ventilador tiene la referencia NR140P, tiene 140 mm de diámetro y cuenta con 7 aspas bastante anchas e inclinadas para fomentar una buena presión estática y que el aire fresco llegue a todos los componentes internos de la fuente.

Aquí está el interior de la fuente de alimentación, y en seguida os explicamos qué es cada parte y para qué sirve, pero a primera vista la impresión que nos da es que han diseñado un interior bastante compacto y bien organizado, con soldaduras excelentes pero con quizá demasiados pegotes de masilla en algunas partes.

Aquí podéis ver a lo que nos referimos con los «pegotes», justo en las bobinas PFC de la fuente.

Un dato curioso es que los dos condensadores japoneses de 105ºC son diferentes en este modelo, aunque son del mismo fabricante.

Las soldaduras son como decíamos excelentes, y aquí tenéis un ejemplo en el filtro de entrada, donde también tenemos dos condensadores Y para ello.

Esta fuente tiene varias sisterboard para diferentes labores, como la de conexiones o la del cableado modular.

En la siguiente imagen podemos ver el transformador principal, con sus propios disipadores pasivos.

Y otro dato curioso, es que la unidad digital de esta HX1000i viene en una sisterboard que, a su vez, tiene algunas conexiones sin utilizar. Esta plaquita contiene el PFC + LLC + conexión de ventilador + las protecciones.

A continuación vamos a ver un diagrama del interior, donde os vamos a ir explicando también qué es cada parte.

Para probar esta fuente de alimentación hemos utilizado nuestro banco de pruebas Alder Lake-S, consistente en el siguiente hardware:

A máxima carga, este equipo tiene un consumo teórico de unos 600 vatios, por lo que una fuente de 1000 vatios como la que tenemos entre manos está claramente sobredimensionada. Sin embargo, para nuestras pruebas esto no es malo, porque vamos a ver los valores donde, en teoría, la fuente de alimentación es más eficiente.

Comenzamos viendo qué es lo que nos ofrece el software, CORSAIR iCUE, que en su última versión detecta automáticamente la fuente de alimentación sin problemas.

En la pestaña refrigeración, podremos no solo monitorizar todos los valores de energía de la fuente, sino también cambiar y crear perfiles y curvas personalizadas para el ventilador.

Como siempre, en la sección Alertas podremos configurar qué queremos que suceda cuando la temperatura de la fuente llegue hasta cierto punto que queramos.

Finalmente, en el apartado Configuración del dispositivo, podemos modificar si queremos que la fuente se comporte como si tuviera un OCP de un raíl o multi raíl, según nos convenga.

Vamos a comenzar con las pruebas enseñándoos los datos obtenidos para la certificación 80 Plus, como la gráfica de eficiencia que podéis ver a continuación y que nos muestra unos datos excelentes (motivo por el que tiene 80 Plus Platinum, claro).

En la siguiente gráfica, que corresponde a la diferencia de entrega de potencia podemos ver que la línea roja no es muy gruesa, lo que significa que la eficiencia de la fuente de alimentación es tan alta que prácticamente la totalidad de la energía que le entra, es la que sale.

Finalmente, en la siguiente tabla podremos ver los datos empíricos que han medido.

Vamos ahora con las pruebas propias, y como siempre hemos hecho uso de OCCT en su última versión para ello. Ya de entrada, durante la prueba de 10 minutos a máxima carga que siempre hacemos, nos hemos podido percatar de que los valores de voltaje no solo son muy exactos, sino también muy estables.

El resultado es francamente excelente, la CORSAIR HX1000i ni se ha inmutado con nuestro hardware de pruebas.

No es la primera vez que CORSAIR se «suma» al mundo completamente digital, pero sin lugar a dudas es una gran noticia que hayan decidido crear esta nueva familia HXi de fuentes de alimentación digitales que ofrecen una mejor estabilidad, control, seguridad y eficiencia que los modelos analógicos existentes, manteniendo su característica calidad y funciones que hacen que, prácticamente cualquier fuente de este fabricante, sea considerada de gama alta.

La CORSAIR HX1000i es el «hermano pequeño» de esta familia, que se ha presentado inicialmente con modelos de 1.000 y 1.500 vatios de potencia máxima, y que demuestra estar perfectamente preparada y lista para las nuevas generaciones de procesadores y tarjetas gráficas que están por llegar, y cuyos requisitos de consumo y eficiencia han obligado a los fabricantes de fuentes de alimentación a «ponerse las pilas».

Como siempre, no podemos sino recomendar esta fuente de alimentación por su excelente rendimiento, y al mismo tiempo le otorgamos nuestro galardón de Oro (que, todo sea dicho, si no fuera tan cara casi seguro que sería de Platino).